FODA: útil, pero insuficiente. ¡Bienvenido FODA+!

11 noviembre, 2025

El FODA por sí solo no es “malo”; está incompleto cuando se usa como lista. Con FODA+ lo conectas a elecciones, lo blindas con análisis de riesgos, lo cuantificas con datos y lo enfocas en jobs to be done reales.

El FODA es ubicuo. También es el motivo de muchas listas largas, vagas y sin prioridad. Su uso es poco riguroso y la tendencia a quedarse en un inventario eterno sin priorización es alta.

Recordemos que el análisis FODA (Fortalezas, Oportunidades, Debilidades, Amenazas) es una herramienta de estudio de la situación de una empresa, institución, proyecto o persona, analizando sus características internas (debilidades y fortalezas) y su situación externa (amenazas y oportunidades).

¿Entonces, lo botamos? No. Tiene que evolucionar. Propongo un FODA+.

1) Empieza “al revés”: primero O/A, después F/D

Antes de mirarnos al espejo (fortalezas/debilidades), entiende el contexto: oportunidades y amenazas que importan. Recién luego evalúa qué F/D son relevantes frente a ese entorno. Evita sesgos de autocomplacencia y genera foco.

2) Pasa de listas a opciones estratégicas

Del cruce FO, FA, DO y DA salen alternativas de acción, no descripciones. Esta mirada obliga a formular opciones (“¿cómo explotamos F para capturar O?”, “¿cómo neutralizamos A con nuevas F?”). Es la bisagra entre análisis y decisión.

3) Inyecta análisis de riesgos

Un FODA ignora riesgos latentes si nadie los dice en voz alta. Haz un análisis de riesgos e imagina que tu plan falló y enumera causas plausibles; así afloran debilidades ocultas y amenazas operativas antes de apostar por oportunidades.

4) Cuantifica y actualiza (menos opinión, más evidencia)

Dos mejoras simples:

• Pondera cada ítem por impacto × evidencia × incertidumbre para priorizar.
• Alimenta el FODA con datos (voz del cliente, mercado, tendencias), reduciendo la subjetividad y haciéndolo dinámico en el tiempo.

5) Define “Oportunidad” desde el Job-to-be-Done (no desde deseos internos)

Una oportunidad no es “queremos vender X”, sino “qué trabajo real del cliente podemos resolver mejor”. Al anclar oportunidades en jobs-to-be-done, las opciones dejan de ser genéricas y se vuelven más reales.

Cómo implementarlo en tu organización (ritmo en 4 sesiones)

1. Contexto y O/A: Trae datos sobre tendencias, clientes, rivales, regulación.
2. F/D relevantes: solo aquellas que mueven la aguja frente a ese contexto.
3. Formula hipótesis de opciones FO, FA, DO y DA, con criterios de elección.
4. Desarrolla un análisis de riesgos: destapa fallas, define medidas, metas, medios y dueños. Instala revisión mensual: el FODA+ es un proceso, no evento.

¿El FODA es aplicable a todo tipo de empresa?

Casi siempre sí, pero con matices. El FODA es un lente útil para ordenar la conversación estratégica en cualquier organización (startup, pyme, corporación, ONG o entidad pública). Lo clave no es el formato, sino cómo lo usas.

Cuándo sirve

• Para un barrido inicial de contexto y capacidades antes de elegir jugadas.
• Cuando necesitas alinear lenguaje entre áreas y sintetizar en una página.
• Como puente entre análisis y ejecución si termina en decisiones concretas.

Cuándo queda corto (y cómo complementarlo)

• Cuando hay alta incertidumbre/innovación (startups tempranas)
• Lista interminable y subjetiva
• Del análisis no salen acciones.
• Riesgos subestimados
• Falta de contexto competitivo/tecnológico

Conclusión

FODA es aplicable si termina en elecciones priorizadas con responsables y métricas. Si queda en póster, no es que el FODA “no aplique”; es que no se usó bien.

El FODA por sí solo no es “malo”; está incompleto cuando se usa como lista. Con FODA+ lo conectas a elecciones, lo blindas con análisis de riesgos, lo cuantificas con datos y lo enfocas en jobs to be done reales. El resultado no es un póster: es un sistema vivo que decide, ejecuta y aprende.